El bebedero Madí es una pieza robusta, monolítica y disruptiva. Su lenguaje contemporáneo y geométrico le permite adaptarse a distintos tipos de espacios y estilos que puedan estar presentes en el entorno.
Tiene una configuración y dimensiones que lo asemejan a una fuente. Propone a los usuarios una nueva forma de relacionarse con el agua, dado que:
• El agua cae de forma vertical, impidiendo así su contaminación.
• Permite el llenado de botellas, lavado de manos, mojado de cabeza y accesibilidad de las mascotas.
• Por su sistema de desagüe, impide las salpicaduras al abordarlo y evita el empantanamiento en el suelo.
• El accionamiento de la válvula es con un pedal, evitando todo contacto o contaminación con las manos.
• Evita la acumulación de agua, impidiendo el desarrollo de larvas o moho.